21-10 Santos Dasio, Zótico y Cayo

Santos Dasio, Zótico y Cayo, mártires
Santas Úrsula y compañeras vírgenes, vírgenes y mártires
San Hilarión de Gaza, abad
San Malco, monje
San Viator, lector
San Severino de Burdeos, obispo
Santa Cilina, madre de familia
San Vendelino, eremita
San Mauronto de Marsella, abad y obispo
Beato Pedro Capucci, religioso presbítero
Beato Julián Nakaura Jingoró, presbítero y mártir
San Pedro Yu Tae-ch´ol, mártir
Beatos Genaro Fueyo Castañon, Segundo Alonso González e Isidro Fernández Cordero, mártires
Santa Laura de Santa Catalina de Siena Montoya y Upeguí, virgen y fundadora 

Santos Dasio, Zótico y Cayo, mártires. Mártires de Nicomedia de Bitinia. Eran domésticos de Diocleciano y fueron acusados, como represalia al cristianismo que profesaban, de incendiar el palacio. Condenados a muerte, fueron arrojados con piedras atadas al cuello al fondo del mar.

Fuente: Todos los santos. José Luis Repetto. Ed. BAC

Estad preparados

Miércoles de la XXIX semana del tiempo ordinario, feria.

Lectura del santo Evangelio según san Lucas:

39Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, velaría y no le dejaría abrir un boquete en casa. 40Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre». 41Pedro le dijo: «Señor, ¿dices esta parábola por nosotros o por todos?». 42Y el Señor dijo: «¿Quién es el administrador fiel y prudente a quien el señor pondrá al frente de su servidumbre para que reparta la ración de alimento a sus horas? 43Bienaventurado aquel criado a quien su señor, al llegar, lo encuentre portándose así. 44En verdad os digo que lo pondrá al frente de todos sus bienes. 45Pero si aquel criado dijere para sus adentros: “Mi señor tarda en llegar”, y empieza a pegarles a los criados y criadas, a comer y beber y emborracharse, 46vendrá el señor de ese criado el día que no espera y a la hora que no sabe y lo castigará con rigor, y le hará compartir la suerte de los que no son fieles. 47El criado que, conociendo la voluntad de su señor, no se prepara ni obra de acuerdo con su voluntad, recibirá muchos azotes; 48pero el que, sin conocerla, ha hecho algo digno de azotes, recibirá menos. Al que mucho se le dio, mucho se le reclamará; al que mucho se le confió, más aún se le pedirá.

Palabra del Señor.

20-10 San Cornelio, santo del NT

San Cornelio, santo del NT
San Caprasio, mártir
San Sindulfo, eremita
San Vital de Salzburgo, obispo
San Andrés «in Crisi» o «Calibita», monje mártir
San Aderaldo, diácono
Santa Adelina, abadesa
Beato Jacobo Strepa, religioso y obispo
Santa María Bertila Boscardin, virgen
Beato Jacobo Kern, religioso presbítero
Beato Shtjefën Kurti, presbítero y mártir 

San Cornelio, centurión. Se trata de aquel centurión Cornelio, de Cesarea de Palestina, a quien Dios eligió para que, por intervención del apóstol san Pedro, empezase en él la evangelización de los gentiles, según se cuenta en el libro de los Hechos de los Apóstoles, capítulo 10. Mientras san Pedro hablaba, descendió sobre los presentes el Espíritu Santo y entonces el apóstol bautizó a Cornelio y a los suyos. Las otras noticias que se han venido dando sobre Cornelio son meramente legendarias.

Fuente: Todos los santos. José Luis Repetto. Ed. BAC

Bienaventurados aquellos criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela

Martes de la XXIX semana del tiempo ordinario, feria.

Lectura del Evangelio según San Lucas:

35Tened ceñida vuestra cintura y encendidas las lámparas. 36Vosotros estad como los hombres que aguardan a que su señor vuelva de la boda, para abrirle apenas venga y llame. 37Bienaventurados aquellos criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela; en verdad os digo que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y, acercándose, les irá sirviendo. 38Y, si llega a la segunda vigilia o a la tercera y los encuentra así, bienaventurados ellos.

Palabra del Señor.

19-10 San Juan de Brébeuf

San Pedro de Alcántara, religioso presbítero
Santos Juan de Brébeuf, Isaac Jogues y compañeros, mártires
San Pablo de la Cruz, presbítero y fundador
San Joel, santo del AT
Santos Ptolomeo, Lucio y otro compañero, mártires
San Asterio, mártir
Santos Sabiniano y Potenciano, mártires
San Varo, mártir
San Grato de Oléron, obispo
San Etbino, eremita
San Verano de Caivallon, obispo
San Aquilino de Evreux, obispo
Santa Frideswida, virgen
Beato Tomás Hélye, presbítero
San Felipe Howard, mártir
Santos Lucas Alfonso Gorda y Mateo Kohioye, religiosos mártires
Beata Inés de Jesús Galand, virgen
San Juan de la Lande, religioso y mártir
Beato Jorge Popieluszko, presbítero y mártir 

San Juan de Brébeuf, presbítero y mártir. Nace en Condé-sur-Vire (Normandia) el 25-03-1593, en el seno de una familia noble. En 1617 ingresa en la Compañía de Jesús. Ordenado sacerdote, se ofrece para las misiones de Canadá y es destinado a la misión de los hurones, donde realiza su labor con paciencia  y fortaleza. En 1628 es llamado a Quebec, regresando a la misión entre los hurones en 1633, fundando diferentes centro misioneros y logrando conversiones. Tras breve regreso a Quebec por haberse fracturado una clavícula, regresa a la misión de San Ignacio. Estaba en la aldea de San Luis cuando es tomado preso por los iroqueses invasores, los cuales lo torturaron de forma horrible y le dieron muerte el 16-3-1649. Canonizado el 29-6-1930.

Fuente: Todos los santos. José Luis Repetto. Ed. BAC

Guardaos de toda clase de codicia

Lunes de la XXIX semana del tiempo ordinario, feria. Se pueden celebrar las memorias de San Pedro de Alcántara, presbítero, o de Santos Juan de Brébeuf e Isaac Jogues, presbíteros y compañeros, mártires, o de San Pablo de la Cruz, presbítero.

Lectura del Evangelio según san Lucas:

13Entonces le dijo uno de la gente: «Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia». 14Él le dijo: «Hombre, ¿quién me ha constituido juez o árbitro entre vosotros?». 15Y les dijo: «Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes». 16Y les propuso una parábola: «Las tierras de un hombre rico produjeron una gran cosecha. 17Y empezó a echar cálculos, diciéndose: “¿Qué haré? No tengo donde almacenar la cosecha”. 18Y se dijo: “Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el trigo y mis bienes. 19Y entonces me diré a mí mismo: alma mía, tienes bienes almacenados para muchos años; descansa, come, bebe, banquetea alegremente”. 20Pero Dios le dijo: “Necio, esta noche te van a reclamar el alma, y ¿de quién será lo que has preparado?”. 21Así es el que atesora para sí y no es rico ante Dios».

Palabra del Señor.

18-10 San Asclepíades

San Lucas, evangelista
San Asclepíades de Antioquía, obispo y confesor
Santos Próculo, Euticio y Acuto, mártires
San Amable, presbítero
San Monón, eremita mártir
San Pedro de Alcántara, religioso presbítero
San Isaac Jogues, presbítero y mártir
San Pablo de la Cruz, presbítero y fundador 

San Asclepíades, obispo y confesor. Obispo de Antioquía que, sin llegar a morir como mártir, confesó la fe en tiempo de persecución. Murió en el año 218.

Fuente: Todos los santos. José Luis Repetto. Ed. BAC

Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios

Domingo XXXIX del tiempo ordinario, solemnidad. Jornada Mundial y colecta por la Evangelización de los pueblos.

Is 45,1.4-6
Sal 95,1.3.4-5.7-8.9-10
1Ts 1,1-5b
Mt 22,15-21

Evangelio según san Mateo.

15Entonces se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta. 16Le enviaron algunos discípulos suyos, con unos herodianos, y le dijeron: «Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad, sin que te importe nadie, porque no te fijas en apariencias. 17Dinos, pues, qué opinas: ¿es lícito pagar impuesto al César o no?». 18Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: «Hipócritas, ¿por qué me tentáis? 19Enseñadme la moneda del impuesto». Le presentaron un denario. 20Él les preguntó: «¿De quién son esta imagen y esta inscripción?». 21Le respondieron: «Del César». Entonces les replicó: «Pues dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios».

Palabra del Señor.

El Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir

Sábado de la XXVIII semana del tiempo ordinario. San Ignacio de Antioquia, obispo y mártir. Memoria obligatoria.

Ef 1,15-23
Sal 8,2-3a.4-5.6-7
Lc 12,8-12

8Os digo, pues: todo aquel que se declare por mí ante los hombres, también el Hijo del hombre se declarará por él ante los ángeles de Dios, 9pero si uno me niega ante los hombres, será negado ante los ángeles de Dios. 10Todo el que diga una palabra contra el Hijo del hombre podrá ser perdonado, pero al que blasfeme contra el Espíritu Santo no se le perdonará. 11Cuando os conduzcan a las sinagogas, ante los magistrados y las autoridades, no os preocupéis de cómo o con qué razones os defenderéis o de lo que vais a decir, 12porque el Espíritu Santo os enseñará en aquel momento lo que tenéis que decir».

Hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados

Viernes de la XXVII semana del tiempo ordinario.

Ef 1,11-14
Sal 32,1-2.4-5.12-13
Lc 12,1-7

121Mientras tanto, miles y miles de personas se agolpaban hasta pisarse unos a otros. Jesús empezó a hablar, dirigiéndose primero a sus discípulos: «Cuidado con la levadura de los fariseos, que es la hipocresía, 2pues nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, ni nada escondido que no llegue a saberse. 3Por eso, lo que digáis en la oscuridad será oído a plena luz, y lo que digáis al oído en las recámaras se pregonará desde la azotea. 4A vosotros os digo, amigos míos: no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, y después de esto no pueden hacer más. 5Os voy a enseñar a quién tenéis que temer: temed al que, después de la muerte, tiene poder para arrojar a la gehenna. A ese tenéis que temer, os lo digo yo. 6¿No se venden cinco pájaros por dos céntimos? Pues ni de uno solo de ellos se olvida Dios. 7Más aún, hasta los cabellos de vuestra cabeza están contados. No tengáis miedo: valéis más que muchos pájaros.

Palabra del Señor.