Estad preparados

Miércoles de la XXIX semana del tiempo ordinario, feria.

Lectura del santo Evangelio según san Lucas:

39Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, velaría y no le dejaría abrir un boquete en casa. 40Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre». 41Pedro le dijo: «Señor, ¿dices esta parábola por nosotros o por todos?». 42Y el Señor dijo: «¿Quién es el administrador fiel y prudente a quien el señor pondrá al frente de su servidumbre para que reparta la ración de alimento a sus horas? 43Bienaventurado aquel criado a quien su señor, al llegar, lo encuentre portándose así. 44En verdad os digo que lo pondrá al frente de todos sus bienes. 45Pero si aquel criado dijere para sus adentros: “Mi señor tarda en llegar”, y empieza a pegarles a los criados y criadas, a comer y beber y emborracharse, 46vendrá el señor de ese criado el día que no espera y a la hora que no sabe y lo castigará con rigor, y le hará compartir la suerte de los que no son fieles. 47El criado que, conociendo la voluntad de su señor, no se prepara ni obra de acuerdo con su voluntad, recibirá muchos azotes; 48pero el que, sin conocerla, ha hecho algo digno de azotes, recibirá menos. Al que mucho se le dio, mucho se le reclamará; al que mucho se le confió, más aún se le pedirá.

Palabra del Señor.

Bienaventurados aquellos criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela

Martes de la XXIX semana del tiempo ordinario, feria.

Lectura del Evangelio según San Lucas:

35Tened ceñida vuestra cintura y encendidas las lámparas. 36Vosotros estad como los hombres que aguardan a que su señor vuelva de la boda, para abrirle apenas venga y llame. 37Bienaventurados aquellos criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela; en verdad os digo que se ceñirá, los hará sentar a la mesa y, acercándose, les irá sirviendo. 38Y, si llega a la segunda vigilia o a la tercera y los encuentra así, bienaventurados ellos.

Palabra del Señor.

Guardaos de toda clase de codicia

Lunes de la XXIX semana del tiempo ordinario, feria. Se pueden celebrar las memorias de San Pedro de Alcántara, presbítero, o de Santos Juan de Brébeuf e Isaac Jogues, presbíteros y compañeros, mártires, o de San Pablo de la Cruz, presbítero.

Lectura del Evangelio según san Lucas:

13Entonces le dijo uno de la gente: «Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia». 14Él le dijo: «Hombre, ¿quién me ha constituido juez o árbitro entre vosotros?». 15Y les dijo: «Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes». 16Y les propuso una parábola: «Las tierras de un hombre rico produjeron una gran cosecha. 17Y empezó a echar cálculos, diciéndose: “¿Qué haré? No tengo donde almacenar la cosecha”. 18Y se dijo: “Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el trigo y mis bienes. 19Y entonces me diré a mí mismo: alma mía, tienes bienes almacenados para muchos años; descansa, come, bebe, banquetea alegremente”. 20Pero Dios le dijo: “Necio, esta noche te van a reclamar el alma, y ¿de quién será lo que has preparado?”. 21Así es el que atesora para sí y no es rico ante Dios».

Palabra del Señor.

Bienaventurado el vientre que te llevó

Lunes de la XXVIII semana del tiempo ordinario. Bienaventurada Virgen María del Pilar, fiesta.

La Virgen del Pilar es una advocación mariana del Reino de España que tiene como centro y origen la venerable imagen, colocada encima de un pilar, en la basílica del Pilar de Zaragoza. La Sede Metropolitana Cesar Augustana es una de las más antiguas de Hispania. Ella representa el pilar de la fe de las santas Iglesias y, como María, Reina de los apóstoles, sostiene con su intercesión materna su misión. La devoción a la Bienaventurada Virgen María del Pilar está muy extendida en España y Latinoamérica.

1Cro 15,3-4.15-16;16,1-2 (o bien Hch 1,12-14)
Sal 26,1.3.4.5
Lc 11,27-28

Evangelio según san Lucas:

27Mientras él hablaba estas cosas, aconteció que una mujer de entre el gentío, levantando la voz, le dijo: «Bienaventurado el vientre que te llevó y los pechos que te criaron». 28Pero él dijo: «Mejor, bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen».

Palabra del Señor.

La boda está preparada

Domingo XXVIII del tiempo ordinario, solemnidad.

Is 25,6-9
Sal 22,1-3.4.5.6
Flp 4,12-14.19-20
Mt 22,1-4

Evangelio según san Mateo.

221Volvió a hablarles Jesús en parábolas, diciendo: 2«El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo; 3mandó a sus criados para que llamaran a los convidados, pero no quisieron ir. 4Volvió a mandar otros criados encargándoles que dijeran a los convidados: “Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas y todo está a punto. Venid a la boda”. 5Pero ellos no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios, 6los demás agarraron a los criados y los maltrataron y los mataron. 7El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. 8Luego dijo a sus criados: “La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. 9Id ahora a los cruces de los caminos y a todos los que encontréis, llamadlos a la boda”. 10Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. 11Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta 12y le dijo: “Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin el vestido de boda?”. El otro no abrió la boca. 13Entonces el rey dijo a los servidores: “Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes”. 14Porque muchos son los llamados, pero pocos los elegidos».

Es Palabra del Señor

Bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen

Sábado de la XXVII semana del tiempo ordinario.

Ga 3,22-29
Sal 104,2-3.4-5.6-7
Lc 11,27-28

Lectura del evangelio de san Lucas.

27Mientras él hablaba estas cosas, aconteció que una mujer de entre el gentío, levantando la voz, le dijo: «Bienaventurado el vientre que te llevó y los pechos que te criaron». 28Pero él dijo: «Mejor, bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen».

Palabra del Señor.

Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros

Viernes de la XXVII semana del tiempo ordinario.

Ga 3,7-14
Sal 110,1-2.3-4.5-6
Lc 11,15-26

Evangelio según san Lucas.

15pero algunos de ellos dijeron: «Por arte de Belzebú, el príncipe de los demonios, echa los demonios». 16Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo del cielo. 17Él, conociendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino dividido contra sí mismo va a la ruina y cae casa sobre casa. 18Si, pues, también Satanás se ha dividido contra sí mismo, ¿cómo se mantendrá su reino? Pues vosotros decís que yo echo los demonios con el poder de Belzebú. 19Pero, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos, ¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces. 20Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de Dios ha llegado a vosotros. 21Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su palacio, sus bienes están seguros, 22pero, cuando otro más fuerte lo asalta y lo vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte su botín. 23El que no está conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama. 24Cuando el espíritu inmundo sale de un hombre, da vueltas por lugares áridos, buscando un sitio para descansar, y, al no encontrarlo, dice: “Volveré a mi casa de donde salí”. 25Al volver se la encuentra barrida y arreglada. 26Entonces va y toma otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí. Y el final de aquel hombre resulta peor que el principio».

Palabra del Señor.

Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá

Jueves de la XXVII semana del tiempo ordinario.

Ga 3,1-5
Sal Lc 1,69-70.71-73.74-75
Lc 11,5-13

Evangelio según san Lucas.

5Y les dijo: «Suponed que alguno de vosotros tiene un amigo, y viene durante la medianoche y le dice: “Amigo, préstame tres panes, 6pues uno de mis amigos ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle”; 7y, desde dentro, aquel le responde: “No me molestes; la puerta ya está cerrada; mis niños y yo estamos acostados; no puedo levantarme para dártelos”; 8os digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, al menos por su importunidad se levantará y le dará cuanto necesite. 9Pues yo os digo a vosotros: pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; 10porque todo el que pide recibe, y el que busca halla, y al que llama se le abre. 11¿Qué padre entre vosotros, si su hijo le pide un pez, le dará una serpiente en lugar del pez? 12¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? 13Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a los que le piden?».

Palabra del Señor.

Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo

Miércoles de la XXVII semana del tiempo ordinario.
Bienaventurada Virgen María del Rosario, memoria obligatoria.

Gal 2,1-2.7-14
Sal 116,1.2
Lc 1,26-38

Evangelio según san Lucas.

26En el mes sexto, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, 27a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. 28El ángel, entrando en su presencia, dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo». 29Ella se turbó grandemente ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquel. 30El ángel le dijo: «No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. 31Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. 32Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; 33reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin». 34Y María dijo al ángel: «¿Cómo será eso, pues no conozco varón?». 35El ángel le contestó: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer será llamado Hijo de Dios. 36También tu pariente Isabel ha concebido un hijo en su vejez, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, 37porque para Dios nada hay imposible». 38María contestó: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra». Y el ángel se retiró.

Palabra del Señor.

Marta lo recibió en su casa. María escogió la mejor parte

Lc 10, 38-42

Lectura del santo Evangelio según san Lucas.

EN aquel tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa.
Esta tenía una hermana llamada María, que, sentada junto a los pies del Señor, escuchaba su palabra.
Marta, en cambio, andaba muy afanada con los muchos servicios; hasta que, acercándose, dijo:
    «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para servir? Dile que me eche una mano».
Respondiendo, le dijo el Señor:
    «Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una es necesaria. María, pues, ha escogido la parte mejor, y no le será quitada».

Palabra del Señor.