Martes de la IV semana de Adviento. Feria privilegiada.
1Sam 1,24-28
Sal 1Sam 2,1.4-5.6-7.8abcd
Lc 1,46-56
Lectura del santo Evangelio según san Lucas:
46María dijo: «Proclama mi alma la grandeza del Señor, 47se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; 48porque ha mirado la humildad de su esclava. | Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, 49porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí: | su nombre es santo, 50y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. 51Él hace proezas con su brazo: | dispersa a los soberbios de corazón, 52derriba del trono a los poderosos | y enaltece a los humildes, 53a los hambrientos los colma de bienes | y a los ricos los despide vacíos. 54Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia 55—como lo había prometido a nuestros padres— | en favor de Abrahán y su descendencia por siempre». 56María se quedó con ella unos tres meses y volvió a su casa.
Palabra del Señor.