El que pierda su vida por mi causa la salvará.

JUEVES DESPUÉS DE CENIZA.

Dt 30,15-20
Sal 1,1-2.3.4.6
Lc 9,22-25

22Porque decía: «El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día». 23Entonces decía a todos: «Si alguno quiere venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, tome su cruz cada día y me siga. 24Pues el que quiera salvar su vida la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa la salvará. 25¿De qué le sirve a uno ganar el mundo entero si se pierde o se arruina a sí mismo?

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *